Para Caja Rural de Navarra nuestro entorno es un bien valioso a preservar y las actividades humanas deben tener presente siempre el cuidado y la conservación del medio natural. Por ello, creemos que tenemos que equilibrar el desarrollo de nuestra actividad empresarial con el entorno, mediante diferentes actuaciones.
Una de ellas es la minimización de los recursos consumidos para lo que está pensada la propia configuración de la red de oficinas, contribuyendo a generar el menor impacto ambiental en el desarrollo de la actividad. Se trata de una red extensa y muchas de esas oficinas están en pequeños núcleos de población, lo que contribuye a que los clientes no tengan que desplazarse a otros núcleos para ser atendidos. Además, los empleados suelen ser del propio pueblo ó cercanos, lo que supone una menor movilidad.
Las principales líneas de actuación en los últimos años han sido:
Consumo de recursos
Gestión de residuos