¿Qué novedades nos encontramos en los mercados?


Caja Rural de Navarra, 23 junio 2022 / Corporativo · Educación Financiera

En las últimas semanas, lo más relevante ha sido los movimientos realizados por los bancos centrales ante la persistencia de una elevada inflación, que de momento sigue sin dar señales de remitir.

Nos encontramos ante un mercado con múltiples frentes abiertos y elevada incertidumbre. La guerra en Ucrania unida a los cierres implementados por China para luchar contra el Covid-19 sigue afectando a las cadenas de suministros globales, y provoca que los niveles de inflación tanto en EEUU como en Europa, en el mes de mayo, superasen el 8%.

Para intentar contener esta inflación, los Bancos Centrales se han visto obligados a actuar lo más rápido posible, con medidas cada vez más restrictivas, asumiendo la posibilidad de impactar en las expectativas de crecimiento de las economías.

Las medidas de actuación de los Bancos Centrales

Con un rotundo mensaje, el presidente de la Reserva Federal ha dejado claro que el banco central estadounidense está concentrando todos sus esfuerzos para volver a niveles del 2% de inflación.

Para conseguir este objetivo la FED ha pisado el acelerador y, el pasado miércoles 15 de junio, anunció la mayor subida de tipos de interés en 28 años, un alza del 0,75% hasta el rango 1,50%-1,75%. Esta es la tercera subida de tipos de la Reserva Federal desde el mes de marzo y no se descarta que se lleve a cabo otra subida en julio del 0,5% o 0,75% para terminar el año por encima del 3%. Además, se mantienen los programas de reducción de balance que aumentarán el ritmo a partir de septiembre.

En la rueda de prensa, Powell quiso transmitir un mensaje de calma, destacando la fortaleza la economía americana para aguantar un endurecimiento de la política monetaria pese a la revisión a la baja de sus previsiones de PIB, apoyada en la solidez del mercado laboral, y poniendo de manifiesto que no quieren inducir a la recesión, sino conseguir un aterrizaje suave de la economía.

Europa no se ha quedado atrás; en la reunión del Banco Central Europeo anticipó que subirá los tipos un 0,25% en julio y dejó abierta la posibilidad de una nueva subida en el mes de septiembre, en función de cómo evolucionen los datos de inflación.

El Consejo de Gobierno del BCE convocó posteriormente una reunión extraordinaria, alarmado por la subida de las primas de riesgo de los países periféricos, con el objetivo de implementar una nueva herramienta “anti-fragmentación”, que permitirá controlar las primas de riesgo de los países más endeudados como Italia, Grecia o España y así evitar poner en riesgo la transición hacia la normalización monetaria. De momento, parece haber logrado su objetivo.

El Banco de Inglaterra también se ha sumado a la oleada de normalización de las políticas monetarias y ha subido un 0,25% los tipos de interés, de la misma manera que el Banco Central de Suiza con un 0,5% (primera subida desde 2007). Mientras el Banco de Japón, de momento, los ha mantenido sin cambios.

¿Qué está pasando con las bolsas?

Los elevados niveles de inflación, la incertidumbre con la guerra en Ucrania y las subidas de tipos de los principales bancos centrales que afectan al crecimiento global, han alimentado la preocupación en los mercados bursátiles. Es por ello que, las principales bolsas han tenido un comportamiento negativo en las últimas semanas, lastradas, entre otros, por los sectores de materias primas y energía.

Los mercados continuarán atentos a los discursos de los bancos centrales, tras el rally de subidas de tipos registrado y la revisión a la baja de las expectativas de crecimiento. Falta poco para la publicación de los nuevos resultados empresariales que mostrarán el impacto de la inflación en la rentabilidad de las compañías. En definitiva,  parece que la volatilidad va a continuar en el mercado durante un tiempo.

La importancia del horizonte temporal y la diversificación

Es momento de recordar la importancia de mantener un enfoque de largo plazo en las decisiones de inversión y hacerlo mediante una cartera diversificada en diferentes tipos de activos y mercados que permita reducir el riesgo.

Los fondos de inversión continúan siendo el mejor vehículo para acceder a las oportunidades globales que nos ofrecen los mercados. Nos permiten alcanzar a una inversión muy diversificada a través de profesionales expertos en gestión de activos.