En verano nos relajamos y estamos más despreocupados. Sobre todo, cuando nos vamos de vacaciones. Antes de irnos, solemos hablar de ello con amigos y conocidos y no somos conscientes de que, a la vuelta, podemos llevarnos un disgusto. A nadie nos gustaría que robasen en nuestra vivienda mientras no estamos. Por ello, si quieres disfrutar tanto de tus vacaciones como del regreso, te recomendamos que pongas en práctica los siguientes consejos de seguridad.
Antes de irnos es importante comprobar que puertas y ventanas están bien cerradas y evitar dejar señales visibles de que la vivienda está desocupada. Siempre es una buena idea dejar las llaves a alguna persona para que se dé una vuelta por la casa y recoja la correspondencia. Si no tienes esta posibilidad, quizá puedas instalar un temporizador para encender alguna luz en un determinado momento del día. Y además, recuerda:
En caso de que este verano no te vayas de vacaciones, puedes contribuir a la seguridad de tu edificio avisando a la policía cuando veas a gente extraña en el portal o merodeando por la calle. Y no dudes en llamarles cuando escuches ruidos en viviendas desocupadas.